UNIDA 4: REFLEXIONES SOBRE LA EVALUACIÓN.

Primeramente me centraré en qué es la evaluación y los procesos de la misma. La evaluación educativa la definiríamos como la parte del proceso de enseñanza y aprendizaje que determina e interpreta el logro de objetivos educativos para su uso en la planificación educativa y su desarrollo, la política de formación y la dotación de recursos.

La evaluación es la parte del proceso educativo que los docentes encontramos mas dificultades para aplicarla y hacer un buen uso efectivo de la misma. Atendiendo al curriculum y a las necesidades educativas, esto provoca que muchas veces los docentes nos encontremos con contradicciones y situaciones de forma que no dejan evaluar de manera justa a las diferentes situaciones y capacidades de los alumnos.

La evaluación la centraríamos en tres puntos a lo largo del proceso de aprendizaje:

  • Evaluación diagnóstica o inicial, la cual se da al inicio de los procesos de enseñanza y aprendizaje.
  • Evaluación formativa, apropiada durante el desarrollo de los procesos e enseñanza y aprendizaje.
  • Evaluación sumativa, la cual se realiza al terminar un periodo determinado de los procesos de enseñanza y aprendizaje.

Si nos centramos en quien realiza la evaluación la podemos clasificar en:

  • Autoevaluación: se produce cuando uno se evalúa él mismo.
  • Co-evaluación: es la evaluación realizada por iguales.
  • Hetero-evaluación: es la evaluación realizada por la persona diferente al aprendiz y a sus iguales, en este caso la realizaría el docente.

Con la normativa vigente de una evaluación  calificativa en lugar de cuantitativa  hace que cuando reflejamos los resultados en un número en lugar de una calificación descriptiva  y cualitativa del proceso, indicando que necesitan para mejora en los objetivos o criterios de evaluación que son indicados en las diferentes áreas de aprendizaje, ya es un indicador un poco abstracto de la lectura de esa evaluación.

Lo importante  como docentes es  que consideremos la evaluación no como algo que marca una cantidad, si no que nos ayuda a ver que va consiguiendo el alumno/a y que necesidad posee en el proceso de realizar la evaluación para ir ayudándole a  superarse y adquirir mayor  nivel de aprendizaje en la taxonomía de Bloom. No solo debemos valorar y evaluar el dominio cognitivo  si no el nivel de complejidad y  competencial, por eso señalo la taxonomía de Bloom como referencia.

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Considero tan importante que los docentes tengamos claro que queremos evaluar y como lo vamos a hacer, pero los alumnos también deben conocer que es lo que esperamos que aprendan y adquieran en el proceso de enseñanza y  aprendizaje.

Son pocas si no nulas las veces que hacemos que los alumnos se evalúen y evalúen a sus compañeros con argumentos fiables.

Esto es debido a que todavía se aplica mucho la instrucción directa por lo que es el docente el que controla todo el proceso, incluido la evaluación, sin tener en cuenta la situación del alumno y su opinión del proceso.

Cuando introducimos metodologías activas hacemos al alumno más partícipe y es en estos caso cuando tenemos un abanico más amplio de la evaluación y de los diferentes tipos de evaluación (  Auto-evaluación, co-evaluación y hetereo-evaluación).

En otro punto estaría los procedimientos  e instrumentos de evaluación que utilizamos.

Los procedimientos de evaluación :

-Método observacional.

-Pruebas escritas.

-Métodos de encuesta.

-Métodos de entrevista.

Instrumentos de evaluación:

-Pruebas objetivas.

-Escala de actitudes.

-Cuestionarios.

-Lista de cotejos.

-Escalas de observación.

-Rúbricas.

Después del repertorio de procedimientos e instrumentos, destaco como instrumento por excelencia, creo de la mayoría de docentes la prueba escrita. Esto es por que en muchos aspectos hemos heredado una praxis, que junto con las editoriales y la utilización del libro, hacen tóxica la practica docente y la evaluación.

Debemos hacer una reflexión profunda y una tertulia amplia en los claustros para trabajar la evaluación y ubicarla en nuestra praxis, conociendo mayor el uso de otros instrumentos y su fiabilidad. Pero para ello también tendremos que cambiar nuestras metodologías, al igual que la introducción de las TICs, no solo como herramientas para ampliar los conocimientos dentro de las aulas, si no para trabajar de manera colaborativa y que nos ayuden a evaluar, auto-evaluar y co-evaluar.

Pero no dejo de lado los cambios en las leyes del sistema educativo, en los cambios de curriculum y aspectos de como evaluar que hacen que los docentes a veces no mejoramos y trabajamos a conciencia los métodos porque todo depende de la estabilidad de los gobiernos. Hay que apostar por una ley estable en educación y una formación consciente del profesorado, que no haga que cada cierto tiempo estas cambian y volver a empezar.

 

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